Yo no tomo bebidas gasesosas y no vivo en Estados Unidos. Pero después de ver la campaña “The Coca-Cola Tattoo Can” me provocó ir al super y comprarme una docena de latas de refresco con mi apellido impreso en un costado. Y es que la nueva campaña de la multinacional que muestra envases de sodas con apellidos latinos fue diseñada para apelar al orgullo de la identidad hispana a través de la herencia familiar.... [Continuar leyendo]