Lo sabemos por experiencia: algunas veces (más de las que quisiéramos recordar) las historias de amor no terminan exactamente con un final feliz. Y de esto no escapan las sociedades, aunque al principio haya parecido una genial idea trabajar con una (o más) personas para sacar adelante tu idea de negocio. Pero cuando un emprendedor está realmente enamorado de lo que hace, tiene más posibilidades de superar una ruptura con su “hermano/hermana del alma”, ya sea por diferencia de opiniones sobre el emprendimiento o sólo por querer seguir caminos distintos.... [Continuar leyendo]