Soy periodista de profesión pero docente por vocación. Confieso que llegué a dar clases como una forma de obtener ganancias adicionales, pero he comprendido que mi permanencia en esta área no se debe a las ganancias. Más bien tengo pérdidas, si lo vemos desde un punto de vista comercial porque es una actividad que demanda mucha dedicación; de modo que la retribución económica no suele estar a la par del tiempo y la atención que se le dedica.... [Continuar leyendo]