El insaciable deseo de superación y el gran ingenio del hombre han sido históricamente dos factores que han impulsado el desarrollo de la vida humana. Hablar de desarrollo, nos remite ineludiblemente al concepto de cambio que no es más que un cúmulo de retos que trae dentro de sí grandes oportunidades, beneficiosas tanto de manera individual como de manera colectiva. Así como sucedió con la revolución industrial en el siglo XVIII, está sucediendo ahora con las nuevas tecnologías; el mundo digital está transformando profundamente los modos en que producimos nuestro capital y eso sin lugar a dudas es una gran oportunidad para emprendedores.... [Continuar leyendo]