Las franquicias son modelos de negocios que tienen partidarios y detractores.
Sin embargo, cuando se trata de plantearse cuáles ideas de negocios podrían ser atractivas, sin duda, la franquicia es una de ellas.
Cada día, en el ámbito empresarial y comercial las oportunidades de negocios como las franquicias están siendo estudiadas por los emprendedores, como una forma de consolidar la independencia financiera. El espectro que estas abarcan incluyen desde el área de salud, alimentación y bebidas, recreación y deportes, hasta textiles y prendas de vestir.
Sin embargo, ante la inquietud de si vale la pena todavía invertir en una franquicia, no es posible responder a la ligera. La razón de ello es la necesidad de sopesar la conveniencia que este negocio representa para el inversionista.
Sin bien la franquicia surgió como una forma de distribución de productos, hoy por hoy ofrece muchísimas ventajas como oportunidad de negocio tanto para el franquiciante como para el franquiciador.
Entre ellas, la franquicia implica para el que la compra, una inversión que puede ser tildada de segura ya que se trata de una especie de “kit”, que incluye la posibilidad de contar con una marca, manuales operativos, guía permanente, enfoque de marketing, rapidez de crecimiento con menores recursos, disponer de personal especializado, entre otras ventajas.
A esto se suma que, por lo general, el franquiciante es un emprendedor en ciernes que tiene toda la motivación para que su negocio crezca.
Si se mira por parte del franquiciador, este se encargará de aportar al franquiciante la materia prima para la fabricación del producto que se va a ofrecer, así como también garantizar que dará una asesoría detallada de cómo vender ese producto u ofrecer el servicio que se haya franquiciado.
Ahora, parece que no todo en las franquicias en coser y cantar.
Como todo negocio tiene sus particularidades. Una de ellas es el llamado canon de ganancia. Si bien el franquiciador comparte las ganancias con el franquiciante, esas están regidas por un canon, o porcentaje determinado. Esto implica que frente a una tienda propia e independiente, la ganancia que arrojará la franquicia será menor.
Por otra parte, la franquicia se rige por normas y procedimientos por lo tanto la elección del franquiciante debe ser cuidadosa, ya que si por alguna razón este cae en una gestión deficiente todo ello podría ser perjudicial para la marca.
La clave para saber si la franquicia es una oportunidad de negocio en la que aún vale la pena invertir, está en la adecuada asesoría.
Al respecto, Luis Vicente García -coach empresarial, conferencista internacional y autor del libro _101 Preguntas y respuestas sobre las franquicias_– considera: “El emprendimiento por sí solo en algunos casos puede ser garantía de éxito; sin embargo, emprender con una base, un conocimiento y un esquema sólido como en el formato de las franquicias, que además nos brinda un respaldo operativo y la experiencia de la empresa a la cual nos estamos uniendo, ayuda a que una persona que sea determinada, con energía, dedicación y con ánimo pueda superar los obstáculos y se acerque mucho más a los resultados que desea alcanzar”.
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